Maracaibo.- Wilson Álvarez se ganó sobre la lomita el derecho a ser uno de los íconos históricos de las Águilas del Zulia.

Álvarez representa para muchos un ejemplo a seguir dentro de la divisa, razón por la que la gerencia rapaz no dudó en darle la responsabilidad de ser nuevamente el coach de pitcheo para la temporada 2016-2017 de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional.

La directiva zuliana espera que el zurdo de Santa Lucía no solo aporte su experiencia como instructor de lanzadores, sino que además le sirva a sus dirigidos, junto con el manager Lipso Nava, como un guía para establecer una mentalidad ganadora y con sentido de pertenencia.

“Se ve un buen grupo de muchachos, la idea es que ellos entiendan el mensaje. Voy a exigir lo mejor de cada lanzador, quiero que ellos ganen confianza y me den el 100 por ciento de sus capacidades sobre la lomita, que les duela el equipo porque sabemos que esta es una afición muy exigente”, indicó Álvarez luego de su primer entrenamiento de pretemporada con las Águilas.

Las Águilas terminaron la temporada pasada con marca de 24-39, uno de los peores registros para la franquicia, por lo que Álvarez reconoce que la afición rapaz tiene mucho que exigir.

“Queremos rescatar ese orgullo por la divisa y que el fanático lo sepa reconocer”.

PLAN DE VUELO

El Intocable, quien encarará su segunda campaña como coach de pitcheo con el Zulia, comenzó a armar su esquema de trabajo, antes del inicio del campeonato el próximo 6 de octubre frente a los Caribes de Anzoátegui.

“Estoy en una etapa de evaluación, de hacerle seguimiento y estudiar a los reportes de nuestros lanzadores, por lo que creo que en el inicio de la próxima semana ya tendré una idea clara de los roles y los brazos con lo que voy a contar”, comentó Álvarez, quien cumplió la misma labor en la zafra 2011-2012, con Nava como estratega interino.

“Conociendo la liga, uno sabe que gran parte del juego se puede definir con el bullpen, por lo que quiero dejar una buena estructura para los matchups (enfrentamientos) que vamos a tener del sexto o séptimo inning en adelante”, puntualizó el instructor.

“Hay un buen grupo de relevistas para armar ese esquema y poner zurdos frente a zurdos y derechos contra a derechos en los innings finales. Para eso tenemos, por ahora, a (Gabriel) Moya, (Arcenio) León, (Elvis) Araujo y luego vendrán Silvino (Bracho), (Leonel) Campos y el resto de los lanzadores que se van a ir incorporando”.

Bajo la tutela de Álvarez, las Águilas dejó una efectividad colectiva de 3.58, la más baja en la LVBP en el campeonato 2011-12.

“Voy a dar lo mejor de mi para ayudar a estos muchachos se sientan en confianza conmigo y motivarlos a hacer las cosas de la manera correcta”.