Caracas.- Avisail García amaneció este martes con promedio de .447, el más elevado de las Grandes Ligas. El jardinero de los Medias Blancas implantó una marca personal de cuatro imparables un partido el domingo y ya suma seis juegos multihits. Es, por mucho, el mejor inicio de campaña en su carrera.

Pero a diferencia de lo que se pueda pensar, el bateador derecho solo intenta simplificar las cosas en el plato.

“Estoy tratando de no hacer mucho”, señaló García a MLB.com. “Ver la bola, no tratar de dar un jonrón o un hit, sino ver la pelota y ponerle la parte gruesa del bate. He tratado de dejar viajar más la bola. Estoy aprendiendo. Solo tengo que seguir trabajando duro y jugar de la forma correcta”.

García se ha embasado en cada uno de sus primeros 12 partidos, 11 de ellos por imparables, y proyecta ligar 284 inatrapables, una cifra improbable, pero que de alguna manera refleja lo que ha estado haciendo. El venezolano también lidera las Mayores en hits (21), OPS (1.128) y OPS ajustado (225), mientras que ha conectado dos jonrones y remolcado 10 carreras.

“Está simplificando las cosas y tratando de mantener su forma de bateo de una manera particular, sin tratar de hacer mucho”, convino el manager de Chicago, Rick Rentería. “Pienso que solo se está enfocando en hacer buen contacto”.

El 82,2% de sus batazos han sido conexiones sólidas, incluido un 31,3% en los que ha golpeado la bola con el barril del bate, mientras que está repartiendo sus batazos hacia todos los sectores del terreno, 62,1% del medio hacia la derecha, de acuerdo con FanGraphs.

El domingo, en el décimo inning contra los Mellizos de Minnesota sacó la bola por el right del Target Field, con un compañero en circulación, para definir el partido.

“Les puedo garantizar que no estuvo pensando que iba a batear un jonrón”, abundó Rentería sobre el nuevo enfoque de García. “Sólo quería conseguir un pitcheo para batear. Con alguien así de fuerte, si haces un buen swing y le pegas bien (a la pelota), tendrá la posibilidades de irse”.

Chicago dejó marca de 6-6 en sus primeros 12 partidos y en esa media docena de triunfos, García ligó para una astronómica línea ofensiva de .577/.593/.923, con un OPS de 1.516, dos cuadrangulares y nueve remolcadas.