Caracas.- Anderson Espinoza fue usado como pieza de cambio por los Padres de San Diego para obtener de los Cachorros de Chicago al jardinero Jake Marisnick, que reforzará sus jardines. La transacción fue oficializada el viernes por la tarde.

Espinoza se encontraba con el Fort Wayne, Clase A+, y marchaba con récord de 0-1, con 5.02 de efectividad, en 12 aperturas.

El caraqueño, de 23 años de edad, regresó este año al montículo por primera vez desde 2016, luego de someterse a un par de operaciones Tommy John.

Espinoza recibió un bono de 1,8 millones de dólares de los Medias Rojas de Boston, durante el período de firmas internacionales 2014-2015, y de inmediato apareció entre los mejores prospectos de pitcheo de las Grandes Ligas. Una condición que fue clave para ser adquirido por los religiosos en el cambió de Drew Pomeranz, durante el receso del Juego de Estrellas de 2016.

Pero se lastimó el codo mientras lanzaba para el Fort Wayne en la Liga del Medio Oeste, el 21 de agosto de 2016. Fue al quirófano y se perdió todo 2017. Más tarde, en 2019, cuando apenas completaba el proceso de rehabilitación de la primera operación, volvió a lesionarse y en abril debió someterse a una segunda reconstrucción del codo. Pese a ello, se mantuvo entre las primeras 30 promesas de San Diego, según MLB Pipeline.

En principio, sus aperturas con el Fort Wayne en la campaña estaban limitadas, mientras reconstruía la fortaleza del brazo, de acuerdo con el plan diseñado por los Padres. Su recta ha sido cronometrada entre las 94 y 95 millas por hora. Ahora, tratará de abrirse paso en las granjas de los oseznos hasta las Grandes Ligas.

Espinoza es reserva de los Leones del Caracas en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional.