Caracas.- Leobaldo Piña no esperaba uniformarse con los Leones del Caracas en la temporada 2017-2018, pero la necesidad agregar un infielder para darle profundidad al cuadro interior llevó a la gerencia melenuda a inscribirlo en el roster activo en el inicio de la décima semana del calendario regular.

El novato respondió de inmediato a la confianza del alto mando melenudo y en su primer turno en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional conectó jonrón, toda una rareza en los más de 70 años en la historia del circuito.

“Estaba bien emocionado, bastante contento. Es un debut que todos esperamos”, le contó el aragüeño al departamento de prensa de Leones. “Estaba en Estados Unidos. Este año no pensaba jugar con el equipo, pero me llamaron para ayudar en lo que pueda”.

La oportunidad se abrió cundo el utility Harold Castro recibió instrucciones de parar de los Tigres de Detroit, su organización en las Grandes Ligas.

Piña entró en el séptimo inning como reemplazo defensivo y en el octavo, en cuenta de 1-0, le desapareció la bola, entre los jardines izquierdo y central del Estadio Luis Aparicio “El Grande”, al lanzador Anderson Muñoz, para convertirse en apenas el noveno recluta en los anales de la LVBP que desaparece la bola en su primera vez al bate y el único de Leones. Fue la única carrera del Caracas en el triunfo de los Águilas del Zulia 10-1, el lunes por la noche.

“Este año los planes eran trabajar en Estados Unidos, así que me sorprendió cuando me llamaron para unirme al equipo en diciembre, pensé que ya no había chance, pero estoy aquí presente”, abundó Piña, que en la 2016-2017 estuvo en los entrenamientos de pretemporada y fue cortado antes del inicio de la campaña.

“No sabía que era una lista tan pequeña de jugadores con un cuadrangular en su primer turno. Me sorprende”, admitió el joven de 23 años de edad, originario de Turmero. “En realidad estaba un poco nervioso, no lo voy a negar, pero es parte del juego. Creo que todo novato siente esa sensación. Después fue normal, como cualquier otro juego”.

Piña sustituyó al segunda base Wilfredo Tovar y pasó a defender la antesala, donde incurrió en una marfilada en su primer lance, ante un batazo de Jesús Flores.

“Después del error estaba nervioso, cabizbajo. Pero el beisbol siempre te brinda oportunidades para hacerlo bien”, apuntó.

El bateador derecho no se ha destacado por conectar vuelacercas en el sistema de granjas de los Cardenales de San Luis. Ahora puede ufanarse de que su primer bambinazo con el uniforme del Caracas lo consiguió en uno de los parques más difíciles para llevarse la cerca en la liga.

“No estaba pensando en un jonrón, solo en darle duro a la bola y salió un buen contacto. Solo eso”, subrayó. “Ahora espero que el equipo me dé la oportunidad de jugar todos los días y dar lo mejor de mí”.