Valencia.- Antes de esta temporada, Elis Jiménez apenas había acumulado nueve apariciones en su carrera de tres zafras en la LVBP. Todo se conjugó y las circunstancias jugaron a su favor para que, la 2019-2020, quedara registrada como su mejor campaña en el circuito local.

“Todo ha sido gracias al trabajo duro que hemos venido haciendo. Sacar los innings en cero, eso es lo importante para ellos (técnicos) y eso es lo que estamos tratando de hacer”, dijo el derecho que, en la ronda regular, impuso topes personales en juegos lanzados, innings acumulados, ponches propinados y, además, consiguió su primera victoria en la liga.

“Primero le doy gracias a Dios por las oportunidades que me está dando en estos momentos y por supuesto a todo el staff del Magallanes por confiar en mí”, apuntó.

Sus buenas actuaciones han venido acompañadas de momentos determinantes para el derecho que, en consecuencia, han sido importantes para los Navegantes del Magallanes. Jiménez, quizás era uno de los apellidos más inadvertidos en el bullpen naviero, situación que cambió el pasado 27 de diciembre.

“Fue algo increíble”, así describió el diestro esa noche, en la que le tocó lanzar en el inning 13 ante los Tigres de Aragua, encuentro que terminó en 20 entradas y que le dio la clasificación a los eléctricos a los playoffs.

El nacido en Valencia, fue el pitcher más destacado de esa larga e histórica jornada. Después de 10 lanzadores, él tuvo la mejor actuación, al completar seis episodios en blanco y apenas permitir cuatro hits. Además de él, sólo quedaba disponible en el bullpen bucanero Bruce Rondón.

“Nunca me imaginé en tener una salida así. El manager (Enrique Reyes) vio que estaba haciendo un buen trabajo y me dejó lanzar”, expresó Jiménez que, su único triunfo en la liga, lo consiguió por ese extraordinario relevo.

En la ronda eliminatoria, el carabobeño sólo tuvo una mala presentación –permitió cuatro carreras y no pudo sacar un out el 27 de noviembre- y de las 15 actuaciones, en apenas dos le pisaron el plato. De a poco, fue tomando un rol más protagónico en el equipo filibustero.

“Yo creo que Elis se ha ganado a pulso esa oportunidad, él tuvo muy buena temporada regular, fue siempre de menos a más y fue de los más estables durante todo el año”, consideró el coach de banca de la Nave, Luis Carlos Rivera que, a su vez, cumple las funciones de instructor de lanzadores. “Conforme fue avanzando la temporada, nos dimos cuenta de que lo podíamos utilizar en momentos más difíciles y así lo ha hecho. Ha cumplido con todas las expectativas, ha cumplido con el trabajo y hasta el momento ha sido pieza importante de nuestro bullpen”.

El tirador de 27 años de edad terminó la primera fase de la actual contienda con efectividad de 2.50, la tercera mejor de su equipo entre los relevistas con al menos cinco apariciones. Sólo permitió cinco rayitas limpias en 18.0 innings.

“Eso lo he venido trabajando día a día, con el pitching coach ayudándome, en el gimnasio y haciendo todo para que todo pasara y gracias a Dios se han visto los resultados”, comunicó el bisoño jugador.

Su buen momento, lo trasladó a la postemporada y, el staff técnico turco siguió confiando en el diestro, a pesar de tratarse de una etapa de mayor jerarquía. Por ende, otra oportunidad determinante le tocó y este, no defraudó, al acreditarse su primer salvamento en su carrera, en su primera actuación de por vida en playoffs.

Elis Jiménez salvó su primer partido en la LVBP en el inicio del playoff entre Magallanes y Cardenales

Esa conquista personal, la obtuvo en el primer juego de la serie ante Cardenales, compromiso en el que actuó en el cierre del undécimo episodio, con dos outs y corredores en tercera y primera base.

“Lo que me pasaba por la mente era sólo sacar ese out y listo, para eso fue que me llamaron”, exclamó Jiménez que, con apenas un lanzamiento ante Wellington Dotel, logró el objetivo.

“Nos hemos dado cuenta a simple vista que él está ya para cosas más importantes y poco a poco el manager fue cambiando el momento en el que lo metíamos”, opinó el instructor Rivera.

Y es que, simplemente, Jiménez ha marcado su nombre gracias a sus resaltantes actuaciones en momentos de apremio para los filibusteros, lo que le ha permitido no sólo permanecer subido al barco durante todo el año, sino también, asumir roles protagónicos con los azules.