Caracas.- Salvador Pérez amaneció este jueves mejor del traumatismo que sufrió en el tobillo derecho el miércoles y fue incluido en la alineación de los Reales de Kansas City por el mánager Mike Matheny, como tercer bate y designado, un rol en el que el receptor espera terminar lo que resta del calendario regular.

 “Hice terapia y jugaré ‘enteipado’. No sé si vuelve a catchear otra vez, pero al menos batear y correr, que es lo más importante”, le dijo el valenciano al periodista Guillermo Arcay, en un Instagram Live.

“Pastillas, venda y vamos a jugar. Uno es guerrero y, aunque siento un poco de dolor, voy a salir a jugar”, reiteró, antes de irse de 4-1, con su doble 24 de la campaña.

Luego de conectar el jonrón 48 de la temporada, para igualar el récord de los Reales de Kansas City, Pérez fue sustituido por Cam Gallagher a la defensiva en el inicio del tercer inning contra los Indios de Cleveland. Después que, tras la primera mitad del segundo inning, sufriera lo que el equipo definió como “un esguince en el tobillo derecho”, tras resbalarse en las escaleras del dugout. El golpe obligó al estelar receptor a necesitar ayuda de los trainers para trasladarse al clubhouse.

“Fue una estupidez”, puntualizó sobre el accidente. “Pero no se trata de seis semanas fuera, como dijeron algunos periodistas, eso no es así. Tengo un ligamento lastimado, pero voy a intentarlo. Es prácticamente seguro que terminaré la temporada como designado. Son cuatro juegos nada más”.

El miércoles sacó la bola por segundo día seguido y después de cada una de esas conexiones, fue ovacionado y la multitud asistente al Kauffman Stadium le llamó para que saliera del dugout a saludar.

“Primera vez que pasa eso en mi carrera, es bonito”, destacó Pérez. “Uno a veces no se da cuenta de lo que hace, te enfocas juego tras juego. Después, el lunes (tras finalizar la zafra), a lo mejor me sentaré en el sillón de mi casa a analizar la temporada”.

Salvy se encuentra en las postrimerías no solo de su mejor cosecha en las Grandes Ligas, sino en año histórico, tras convertirse en el receptor con más jonrones en una campaña, dejando atrás al mítico miembro del Salón de la Fama, Johnny Bench.

“Lo importante es que estuve saludable todo el año y espero terminar fuerte”, enfatizó.